Stendhal (Sajonia-Anhalt) – Sandra Smolny, de 34 años, ha luchado con su cuerpo durante mucho tiempo. Hoy, la mujer de Altmark, que usa una talla 48, tiene tanto éxito como modelo con curvas e influyente que ha podido convertir su pasatiempo en las redes sociales en una carrera.
Más de 60 mil seguidores siguen el día a día de Sandra en Instagram y más de 80 mil seguidores en Tik Tok. La marca de cuidado corporal Dove se publicitó en Alemania y Austria con etiquetas de Sandra en ropa interior.
«¡Nunca me había atrevido a hacer eso antes! Siempre pensé que primero tenía que ponerme delgada para poder usar disfraces sexys”, dice la empresaria entrenada. «Usaba ropa negra casi exclusivamente».
En 2018, todo cambió. “Debido a las fluctuaciones hormonales después del embarazo, desarrollé un trastorno de distribución de grasa por lipedema”, dice Sandra. Sus piernas y brazos estaban gravemente hinchados y sufría un dolor insoportable.
Sandra decidió realizarse varias operaciones en las que se realizó la liposucción de la enferma. Y como no pudo encontrar suficiente información sobre este tema en Internet, escribió su propio blog. Entre cirugías, asistí a un seminario en Hamburgo sobre «Curvas y confianza en uno mismo».
«Ella hizo clic en este seminario», dice Sandra. Se dio cuenta de que podía y debía amarse a sí misma tal como era. «Ahora, si quiero usar una prenda que se parezca a mis amigas flacas, lo hago», dice.
Su nuevo lema «La belleza no tiene talla» Sandra presenta su ropa en Instagram con este nombre, por lo que es un modelo a seguir para muchas niñas y mujeres. El número de sus seguidores crece constantemente, y cada vez más empresas descubren que ella es una socia publicitaria.
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