(Ciudad de México, 9 de junio de 2024, América 21).- La noche del 6 de junio (hora local), las autoridades mexicanas desmantelaron un campo de refugiados en la Ciudad de México. Más de 500 personas, la mayoría de ascendencia haitiana, fueron trasladadas a refugios en estados cercanos. La operación de funcionarios de la Agencia de Migraciones y de la Guardia Nacional terminó sin incidentes pasada la medianoche, informó el periódico. Universal.
Sin embargo, las organizaciones de migrantes temen que los refugiados sean enviados de regreso a Chiapas, cerca de la frontera con Guatemala. Esto ya ocurrió durante evacuaciones anteriores de este campo en la plaza Giordano Bruno, cerca de la oficina de asilo.
La oficina de solicitudes de asilo está cerrada
El centro de solicitudes de la autoridad de asilo en la Ciudad de México ha estado cerrado desde el 29 de mayo mientras la autoridad se traslada a nuevas instalaciones. La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) expresó su preocupación e instó a las autoridades mexicanas a «brindar atención segura y digna a quienes se han visto obligados a abandonar sus hogares y venir a la Ciudad de México en busca de protección».
Según estadísticas gubernamentales, un total de 30.230 personas solicitaron asilo en México de enero a abril, la mayoría de ellos procedentes de Honduras (12.782), Cuba (6.703), Haití (2.606) y El Salvador (2.297). Las solicitudes de asilo en México han aumentado drásticamente desde que el gobierno de Estados Unidos restringió aún más el asilo.
Campaña electoral estadounidense con política de inmigración
A principios de junio, el presidente estadounidense, Joe Biden, firmó una orden ejecutiva para ayudar a las autoridades a deportar a personas que ingresaron ilegalmente al país sin considerar primero sus solicitudes de asilo. Organizaciones de derechos humanos han anunciado acciones legales contra la orden ejecutiva.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, criticó inmediatamente a Biden, diciendo que los funcionarios estadounidenses no estaban deportando personas «directamente» a sus países de origen, sino a México. López Obrador dijo que creía que los políticos estadounidenses estaban «utilizando el tema de la inmigración con fines electorales». «Se representan posiciones que no contribuyen a resolver los problemas, sino que los complican», dijo el presidente de México, quien ya había hablado por teléfono con Biden sobre el tema.
Desmantelan campo de refugiados en Ciudad de México América Latina con licencia de Newspool Creative Commons Atribución-CompartirIgual 4.0 Internacional.
«Gurú profesional del café. Jugador típico. Defensor del alcohol. Fanático del tocino. Organizador».