Una y otra vez, los migrantes ponen en peligro su vida al intentar cruzar el Canal de la Mancha desde la costa francesa: tres refugiados que han intentado cruzar el Canal en un kayak han desaparecido desde el viernes. El día anterior, se descubrieron dos kayaks flotando frente a la costa de Calais y se rescataron dos náufragos.

El minorista de artículos deportivos Decathlon está reaccionando ahora a una intervención en su propio dominio: la empresa está eliminando las ventas de kayaks en sucursales de dos ciudades del norte de Francia.

La oficina de prensa de Decathlon anunció este martes que en sus tiendas de Calais y Grand Synthe, «debido a la situación actual», la venta de kayaks se ha detenido.

La razón dada fue que la embarcación de recreo no era adecuada para cruzar el Canal de la Mancha y que la gente podría poner en peligro su vida si lo intentaba de todos modos. El gabinete de prensa añadió que se seguirán vendiendo en Calais y Grands-Synth productos que «aumentan la seguridad en el mar, como chaquetas, remos o protección térmica». En consecuencia, la propuesta de quitar los kayaks de la vista provino de las propias tiendas.

Decenas de miles de intentos desde principios de año

Entre enero y finales de septiembre, casi 30.000 inmigrantes intentaron cruzar el Canal de la Mancha hacia Gran Bretaña. En las últimas semanas, el número de intentos y, con él, el número de incidentes, ha aumentado dramáticamente, aumentando las tensiones con el gobierno británico.

El ministro del Interior francés, Gerald Darmanin, y su colega británico Priti Patel dijeron el martes que querían fortalecer su cooperación para poner fin a los «cruces peligrosos».

El mismo día, las fuerzas de seguridad despejaron un campo de refugiados salvaje en Grand Synthe, donde viven más de 1.000 personas. Además, 272 personas fueron rescatadas del mar frente a las costas de Francia. Intentaron llegar a Inglaterra en botes improvisados.